SEMANA 36
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SEMANA 36: CAMBIOS EN LA VAGINA A LAS 36 SEMANAS DE EMBARAZO
El último mes de embarazo trae consigo diversos cambios en el cuerpo, especialmente en la zona vaginal, que es una de las áreas que experimenta más cambios a las 36 semanas de embarazo. Estas transformaciones se deben al aumento de hormonas como la progesterona y el estrógeno, que pueden estimular las glándulas vaginales y provocar ciertos síntomas característicos.
Síntomas semana 36 de embarazo
El aumento de los niveles de progesterona y estrógenos pueden estimular diversas glándulas presentes en la vagina y producir los siguientes síntomas:
- Flujo: en la semana 36 de embarazo puedes experimentar un aumento en la secreción vaginal, que dependiendo de las características organolépticas (olor, color y espesor) de esta puede ser de diversos orígenes. Las secreciones suelen ser acuosa, lechosa o espesa y suele ser inodora. Estas características pueden ser normales, pero debes llevar una buena higiene íntima, usando productos específicos para ello, para evitar posibles complicaciones. Por otro lado, si la secreción aumenta, y, además, presenta mal olor y síntomas de picor o escozor es conveniente que utilices óvulos, higiene y suplementos para tratar y prevenir las infecciones. Además, en la semana 36 de embarazo se suele realizar un exudado vaginal y rectal con el fin de detectar presencia de bacterias que puedan complicar el parto.
- Relaciones sexuales: aunque el aumento del flujo pueda facilitar las relaciones sexuales, también es posible que sean más dolorosas debido a las molestias que pueda causar a las 36 semanas de embarazo la presión ejercida sobre la vejiga y la zona vaginal por el útero. Si no presentas esta lubricación, puedes usar lubricantes de base acuosa para mejorarlas.
- Hinchazón: esta presión, unida al aumento del flujo sanguíneo, puede provocar una inflamación en la zona vaginal, hecho que es muy común y transitorio. Esta hinchazón puede provocar a las 36 semanas de embarazo una sensación de pinchazos en las partes íntimas. Después de dar a luz, vas a necesitar un tiempo para que vuelva a la normalidad y el uso de crema regeneradoras y rejuvenecedoras con ácido hialurónico y factores de crecimiento celular, te va ayudar a acelerar el proceso y que se produzca una recuperación completa.
- Desgarros: el aumento de la presión y este aumento de tamaño puede producir desgarros y heridas en la zona vaginal. Además, en el momento del parto (que esta al llegar) se suele usar la técnica de la episiotomía, que consiste en cortar la zona del perineo (área entre vulva y ano) para favorecer la salida del feto. Por ello, es el momento de comenzar a realizar los masajes perineales con aceites adecuados para la zona vaginal.
Consejos para prevenir los síntomas asociados a los cambios en la vagina a las 36 semanas de embarazo.
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Masajes perineales: se trata de preparar la zona del perineo para el parto. La elasticidad de esta zona es limitada con respecto al aumento de la luz de la vagina en el momento del parto. Los masajes se tienen que realizar con suavidad en la zona del perineo para aumentar la elasticidad y flexibilidad. Los pasos a seguir son:
- Limpia tus manos con agua y jabón.
- Usa una cantidad adecuada de aceite o lubricante en la zona del perineo.
- Coloca tus pulgares dentro de la vagina y los dedos índices en el exterior, en la zona del perineo.
- Realiza movimientos circulares y suaves hacia abajo y hacia los lados para masajear el tejido durante unos minutos.
- Aplica una ligera presión hacia abajo y hacia los lados durante unos minutos más.
- Repite este proceso al menos una vez diariamente, preferiblemente a partir de la semana 36 del embarazo.
- Ropa interior: mejor que sea de algodón, ya que es transpirable y mantiene la zona seca. Evita las telas sintéticas que evitan la transpiración y la ropa interior ajustada.
- Zona íntima limpia y seca: lávate con agua tibia y no utilices productos con jabones o esencias perfumadas. Seca bien la zona después del lavado con productos adecuados.
- Evita infecciones: usa geles y óvulos con prebióticos para evitar la aparición de infecciones vaginales en la semana 36 de embarazo.
- Usa compresas: si observas que la secreción es abundante y no presenta signos de infección, utiliza compresas para que no se mantenga húmeda la zona.