Cómo el crecimiento del útero durante el embarazo afecta el tracto digestivo
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Durante el embarazo vas a experimentar diversos cambios hormonales, especialmente, experimentarás un aumento en los estrógenos y en la progesterona, hormonas que están directamente relacionadas con el sistema digestivo, y específicamente en el estreñimiento durante el embarazo. Además, los cambios físicos a los que es sometido tu cuerpo y otros factores externos como la alimentación también pueden influir en la aparición de este síntoma.
El estreñimiento consiste en la disminución del número de deposiciones y de la función del aparato digestivo. Puedes considerar que tienes estreñimiento cuando no consigues defecar durante más de tres días consecutivos.
La progesterona actúa sobre el músculo liso, músculo que predomina en las mucosas internas y en todo el aparato digestivo, produciendo una disminución del tono del mismo. La reducción del tono muscular liso en el intestino delgado y grueso producen que se ralentice la motilidad intestinal, lo que significa que el contenido alimenticio tarda más en llegar al final de este sistema y así dificultar la evacuación.
El exceso de estrógenos puede influir también de manera directa en ciertos músculos lisos, así, tanto en el embarazo, como si presentas unos niveles elevados de estrógenos en tu etapa fértil del ciclo menstrual, puede experimentar este síntoma, puesto que esta hormona, puede reducir la capacidad contráctil del colon.
Para este tipo de estreñimiento, es conveniente que utilices componentes que puedan aumentar la motilidad intestinal, y que faciliten que alimento pueda fluir con mayor facilidad por el intestino. Nuestros productos con Sen, encargado de aumentar la motilidad del intestino, Tamarindo, que aumenta la cantidad de agua en la luz intestinal, e Hinojo, que reduce la sensación de hinchazón y malestar. Estos productos naturales son buenos remedios para el estreñimiento en el embarazo.
Conforme avanza el embarazo, tu cuerpo se acostumbra a esta nueva situación de aumento de estrógenos y progesterona, por lo que afectan de forma menor al estreñimiento. Pero también es cierto que existen otros factores que pueden influir en esta patología y hacer que aparezca o sigas sintiéndolo más adelante.
Un factor importante es el aumento del tamaño del feto, y, por lo tanto, del útero. Este hecho hace que, cuando alcanza un tamaño considerable, empiece a presionar los órganos más cercanos a él, como es la parte baja del aparato digestivo. La presión que ejerce el útero sobre el colon y los intestinos delgado y grueso, hacen que disminuya la luz de los mismos, por lo que se dificulta el paso del quimo, contenido del alimento digerido en el intestino, por el aparato digestivo. Este tipo de estreñimiento requiere que lleves una dieta rica en fibra, o que uses suplementación con fibra para que el contenido intestinal pueda fluir con mayor facilidad y ayudarte a paliar el estreñimiento en el embarazo.
Los cambios producidos en la alimentación durante el embarazo también pueden hacer que experimentes cambios en el tránsito intestinal. Como alimentos que antes comías y ahora te producen sensación de náuseas, o alimentos por los que sientes apetencia y que tienen efecto astringente (grasas, comidas rápidas, azúcares simples). Nuestro nutricionista especialista en embarazo puede ayudarte a llevar una dieta adecuada durante esta etapa.
Otro factor a tener en cuenta es la disminución del ejercicio físico durante el embarazo., tanto en cantidad como en intensidad. Este factor hará que disminuye el metabolismo, dificultado la digestión de los alimentos, además, el sedentarismo contribuye a disminuir la motilidad intestinal. Nuestro entrenador personal para embarazadas te puede orientar a realizar ejercicios adecuados y adaptados a tus necesidades.